Las recomendaciones para la prevención del suicidio pueden ser útiles y productivas siempre y cuando podamos asumir que la prevención, por su propia naturaleza, siempre mira hacia adelante. Para ello, los familiares de personas fallecidas a causa de suicidio deberíamos tener razonablemente trabajado nuestro propio sentimiento de culpa: Asumir que en el pasado hicimos lo humanamente posible, que el concepto de "humanamente" incluye cometer errores y que es injusto, e incluso cruel, juzgar nuestras acciones pasadas desde la experiencia acumulada luego. Especialmente los padres, siempre cometemos errores. Las recomendaciones tampoco evitan que esos errores se sigan cometiendo, pero sí nos permiten reflexionar sobre ellos para mejorar cada día. Solo desde ese lugar considero que las recomendaciones para la prevencion del suicidio publicadas recientemente por la ONG Healthy Children pueden resultar útiles.
